ANIMALES SENIOR y alimentación natural

Cuántas veces has escuchado: Mi perro/gato es muy mayor, no merece la pena cambiarle la alimentación cuando la que come le sienta bien”.

Precisamente en animales mayores es muy importante dar una alimentación de calidad, ya que con la edad, comienzan a deteriorarse los órganos y empiezan a aparecer problemas de salud asociados a esta edad más avanzada y su estilo de vida.

¿Qué ventajas tiene la alimentación natural frente a los ultraprocesados en edades avanzadas?

Individualización

Con la alimentación natural es mucho más sencillo hacer cambios en la dieta que se ajusten a cada peludo, pudiendo tener en cuenta: la actividad física, el estado reproductivo (castrados o enteros), edad y estado de salud.

Bajo porcentaje de carbohidratos

Los azúcares son el cultivo perfecto para las enfermedades. Los alimentos altos en carbohidratos tienen una mayor cantidad de azúcares y pueden influir en la salud de nuestros animales. La alimentación natural, y sobre todo la alimentación BARF es muy baja en carbohidratos, manteniendo el correcto funcionamiento de los órganos y evitando la inflamación generalizada del organismo.

Variabilidad de menús

Muchos animales se pasan toooooda su vida alimentándose con el mismo pienso de la misma marca y el mismo sabor. ¿Te imaginas alimentarte día tras día con el mismo plato?.

Con la alimentación natural puedes variar los ingredientes diariamente, aportando una sensación mucho más satisfactoria en tu perro o gato, ya que la salud emocional también es importante.

Asimilación de los nutrientes

La alimentación natural mantiene intacto (BARF) o con muy bajo procesado (cocinado) las materias primas de los menús. Esta forma de mantener los alimentos hace que las estructuras de las proteínas se mantengan intactas y su asimilación sea correcta, lo que favorecerá la formación de músculo y ralentizará el deterioro del mismo. 

¿Sabías que esto repercute directamente en las emociones de los peludos? El digestivo es el segundo cerebro del cuerpo, y la correcta asimilación de triptófano hace que la formación de serotonina sea mucho más efectiva. ¿Te suena esta hormona? Efectivamente, es la hormona de la felicidad.

Bajo procesado del alimento

Los piensos o latas ultraprocesadas sufren procesos de altas temperaturas y extrusionado que desencadena reacciones químicas y físicas perjudiciales para la salud, como ocurre con la Reacción de Maillard, cuyo producto resultante puede ser cancerígeno.

La alimentación BARF (cruda) no lleva ningún procesado, únicamente se congela para mantener a raya las bacterias presentes en el alimento y eliminar los parásitos. En el caso de la alimentación cocinada, se somete a bajas temperaturas y/o al vapor para mantener lo más intactas posibles las estructuras moleculares de los alimentos, facilitando su asimilación.

Humedad

El agua es el compuesto mayoritario del organismo y es el medio en el que se desarrollan todas las reacciones químicas y el viaje de las células a través del torrente sanguíneo. En animales como el gato, es aún más importante, ya que son animales desérticos los cuales por naturaleza tienden a conseguir esa hidratación a través de la comida, lo que hace que a priori no beban demasiada agua.

El aporte de humedad en la alimentación no solo evitará una deshidratación crónica sino que también mejorará la lubricación de las articulaciones reduciendo la inflamación de las mismas. 

¿Qué alimentación natural es más adecuada para un animal senior?

Esta pregunta es difícil de contestar, ya que dependerá de cada animal y de cada especie.

En general, la alimentación natural BARF es fisiológicamente más adecuada tanto para perros como para gatos senior, especialmente para los gatos. Sin embargo, puede haber ciertas condiciones que hagan que la dieta cocinada sea preferible:

  • Si le cuesta digerir la dieta BARF (aparece reflujo, acidez de estómago o vómitos/diarreas persistentes)

  • Si es de “morro fino”: los animales más sibaritas suelen tolerar mejor la dieta cocinada al ser más sabrosa y con un olor más llamativo

  • Ciertas enfermedades incompatibles con dieta BARF

  • Si necesitan menor cantidad proteica por su condición particular

  • Si no toleran los huesos carnosos o dietas más altas en grasa

  • Aquellos con ausencia de piezas dentales o con dolor en la boca (siempre que no sea una alimentación previamente triturada)

¿Aún no te has animado con tu abuelito?

Redactado por: Isabel Calzado Sánchez, veterinaria nutricionista de Natuka

 

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